martes, 2 de agosto de 2011

La fuerza esta en ti misma



Ayer me preguntaste como me sentía, ¿Como sabes que duele? Te describí la sensación que yo sentí, parecía que me estrujaban el corazón, que me presionaban y buscaban empequeñecerlo cada vez mas.

Por horas pedí a gritos que me dejaran ir, pero no logre escapar y el dolor nunca disminuyó... solo fue el espejismo que cree yo. El dolor estaba ahí latente, si bien no aumentaba tampoco desapareció, el mal ya estaba hecho.

Esa fue la única descripción que te pude dar, porque si tu me preguntas como se cura una herida con mi "poca experiencia" solo debería decirte que el tiempo ayuda, que el trae consigo el olvido, que tienes que enfocarte en otras cosas y dejar de lado ese mal recuerdo.

Pero no pude agregar mas palabras, preferí callar, guardar silencio y no mentirte. Pues decirte que a veces durante ese olvido duele mas, porque es luchar contra tus propios sentimientos seria anticiparme. Sabes muy bien que solo de ti depende cuanto mas ese recuerdo te pueda lastimar... Ayer solo supe decir: ¡hermana fue un riesgo que ambas decidimos correr!

No pensé que el fuera capaz de dañar a quien por tantos años me mencionó como una de las personas mas importantes en su vida. ¿Sabes todo lo que paso por mi cabeza?... ¿donde quedó ese prototipo de gran mujer?, ¿Cuando acabó con las ilusiones que creó para los dos?, ¿Donde quedaron sus frases de darle tiempo al tiempo?.

No que tarde o temprano estarían juntos si el sentimiento persistía... como pedir o esperanzarse en estar a tu lado algún día si hoy estaba acabando con el amor que siempre profesó. ¿Ahora entiendes porque se me hace tan difícil creer en la gente? Como pensar que la próxima persona en llegar sera distinta, si dice cosas y hace otras, si te falla cada vez que puede, si veo que todos terminan por dañar a la gente que amo.

Como puedo seguir creyendo si esta vez en la que todo fue a "capa y espada" también erró y no supo dar mas explicación. Como puedo querer escucharlos, aceptar sus consejos, sus palabras o criticas si él inconscientemente o no te dañó.... y no se tanto le gusta apostarle a su suerte que cree que no mereces una explicación.

Ayer te lo dije y hoy te lo repito, se que tarde o temprano va querer tocar el tema, no se cuanto tiempo tenga que pasar pero lo va hacer... son tantos años a su lado que no lo creo tan cobarde de que apenas se acabe su cuento de hadas, de la media vuelta y vaya corriendo a arrojarse a tus brazos como si nunca hubiera pasado nada.

Hoy sabes lo que sentí yo hace cuatro años... Hoy se que sentiste tu hace un mes. Recuerdas ambos tienen la misma escuela. Hoy sabes como me siento, que ya ni lloro, que es un desconcierto y por ello la pena es mayor porque es por dentro... hoy sabes que duele, yo se como duele...

Siempre conociste mi congoja, fuiste mi almohada por muchos años... me viste llorar, reír, emocionarme con tantas historias y siempre me dijiste vez por eso no quiero saber que es amar, porque veo que cuando el corazón elige y se equivoca... no hay "curita" para esa enfermedad.

Te conozco tantos años, haz sido mi soporte en todos los aspectos... supiste llegar a mi vibraste a mi lado con esa nueva luz que apareció en mi vida hace casi 700 días, luego de tanto desengaño, me advertiste y por estar pendiente de mi o por ver que me anime a saltar al vacío... decidiste dar un paso mas y saltar conmigo sin imaginar que tan hondo podías caer.

Fue un riesgo que ambas decidimos correr, yo especulando sobre lo incierto pues no lo conocía, tu intentando creer y pensar que por todos los años de amistad y por tanta profecía, madurez o enseñanzas que le dio la vida, esta vez seria distinto... que no cometería los mismos errores que cometió su compañero de guerrillas años atrás, que tantas lagrimas le costaron a su hermana.

Hoy sabes que "es triste despertar y ver la realidad, ver que es mentira lo que sentías o saber que es el final." Que mas quisiera yo que cambiar las emociones que estas sintiendo hoy, que tus lagrimas y tu pena sean producto de la congoja que hoy siento y que solo llores porque no puedes resistir verme mal.

Se que te apena reconocer que te equivocaste, que sientes cólera contigo misma por caer, por haber dejado derrumbar ese muro que te protegía del mal. Yo se que es difícil ver caer ese antifaz que no te permitía ver lo que hacia.

Hoy no tengo una respuesta concreta como en ocasiones anteriores sobre el olvido. Hoy solo puedo decirte que en el dolor la fuerza esta en tu fe, en ti misma pues esa lección me la enseñaste tu. La herida cierra a veces mas tarde que temprano pero cierra al fin y al cabo mientras no permitas que la arañen y se que tomaste la decisión correcta.

Hablarte del perdón seria gastarme pues se que en tu corazón no cabe el odio, ni el rencor... solo llega la ira contigo misma por creer que no hubo engaño, que la que fantaseo sola fuiste tu. Pero sabes yo conozco la realidad y cuando hay que buscar culpables tendrían que dar la cara los dos... pero no te preocupes este tema queda off the record. Volteemos la pagina, tu novela llegó a su fin, quememos el libro y dejemos volar las cenizas.

Te quiero mas que demasiado, yo aun tengo cosas por resolver y algo que no te dije ayer fue que admiro esa garra que le pones a cada cosa, ese temple para tomar decisiones... ayer opté por callar y no supe mas que decir, estaba tan nublada con tantos contrastes en mi memoria que no pude pronunciar mas palabras. Hermana ayer el consejo y la enseñanza me las diste tu.

"En medio del dolor mi fuerza fue mi fe. Y en mil lamentos buscando aliento mire hacia el cielo y pregunte:  ¿Cómo se cura una herida, cuando perdonar es tan difícil y cuando olvidar no se consigue? ¿Como enfrentarse a la vida, con el corazón hecho pedazos, cuando la desilusión te quiebra el mundo y pega golpe  bajo?"

"La fe mueve montañas, y después de todo
lo que nos sucedió es hora de enfrentar la realidad
y aceptar que no hay nada seguro,
que solo se puede contar con Dios"

No hay comentarios:

Publicar un comentario