viernes, 4 de junio de 2010

Soñando despierta


Esta noche recogí un tintero y un papel regado en el pasillo de un viejo hotel. Como llegue ahí no lo se, pero extrañas sensaciones embargan mi interior y me hacen divagar por todos los rincones de este viejo salón.

Intentar volver a componer, era como renacer. Es comenzar a vivir, pues siempre hay que empezar desde cero. Hoy vuelvo a imaginar, a crear un mundo, a idealizar y anhelar lo bello, lo puro; a creer que el mundo puede ser sincero.

Un cigarro y un café acompañan a mi corazón que duda al recordar todo lo negativo que invade este mundo terrenal. Y en ese mismo instante descubro que da lo mismo dormir o estar despierta pues cuando estoy despierta solo pienso en ti y cuando busco dormir termino soñando contigo.

Estar despierta y soñar contigo es mi rutina, es mi calma, pero también mi agonía pues temo cansarme y no esperarte. Hoy se que existes y por ello me siento plena, llena de dicha, eres mi felicidad, mi mayor alegría.

Hoy se que no me vas a mentir porque tu y yo vemos lo mismo. Soy la chispa que alumbra tus días. Quien lo diría, era cosa de pensar con la cabeza fría, yo que ya casi ni sentía mis palpitos, logre descubrir que darías la vida por mí pues soy todo para ti, y eso me reconforta.
Soy todo lo que existe ante tus ojos, todo lo que puedes y deseas ver. Lo que ya esta escrito, lo puro, en lo único que crees. SOY TU VERDAD.

Y ambos somos la llama que brilla con ardor en la oscuridad... solo no intentes compararme y mucho menos dominarme porque no logrará superarme

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